Cuando Miguel y Marichu me comentaron que querían unas fotos simpáticas alegres y con mucha naturaleza pensé en este lugar. Además, disponían de poco tiempo, así que el lugar era ideal. Tanto ella como su recién estrenado marido son desenfadados, divertidos y llenos de energía. Así que nos fuimos con ellos a pasar una gran tarde. Espero que os gusten las imágenes tanto como a mí.